Rego defiende la necesidad de garantizar los derechos universales de la infancia migrante que llega a España
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, interviene en el conversatorio «Pacto Europeo de Migración y Asilo: un análisis con perspectiva de infancia».
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha puesto en valor la importancia del Real Decreto-Ley aprobado en el Consejo de Ministros celebrado el 19 de marzo para la acogida solidaria de niños y niñas migrantes en situación de desamparo. Una norma que, según ha explicado, garantiza los derechos universales de la infancia en España.
La ministra ha lamentado «la reacción de la derecha y de la extrema derecha ante un acuerdo que garantiza el cumplimiento de nuestras obligaciones para con la infancia, el respeto al derecho internacional y a los derechos humanos». Asimismo, ha pedido «empatía y altura de país» para poder seguir avanzando en los derechos de los niños, niñas y adolescentes.
Así lo ha expresado la ministra Rego durante su intervención en el conversatorio «Pacto Europeo de Migración y Asilo: un análisis con perspectiva de infancia», organizado por el Ministerio de Juventud e Infancia con motivo de la celebración Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial. El acto ha sido moderado por Sandra de Garmendia, directora general de Derechos de la Infancia y la Adolescencia.
En la charla también han participado Nuria Díaz, coordinadora estatal de Incidencia de CEAR, Lucila Rodríguez-Alcorcón, directora general de la Fundación Por Causa, y Amaira Iguarán, vicepresidenta de Salvamento Marítimo Humanitario.
La ministra de Juventud e Infancia ha advertido que la aplicación del Pacto Europeo de Migración y Asilo no debe reproducir un modelo basado en la protección de fronteras antes que en la protección de personas. Ha manifestado, también, la importancia de que se atienda adecuadamente las particularidades de la infancia.
Rego ha defendido la existencia de «margen para que España adopte una postura más garantista» y ha reconocido la labor de las organizaciones de protección de la infancia y de derechos humanos «para incluir cambios en la Ley de Asilo que refuercen los derechos de los niños y niñas migrantes».
«Hoy más que nunca, debemos recordar que las políticas migratorias no pueden basarse en la criminalización de quienes buscan protección. La migración no es una amenaza, es una realidad humana. Y nuestra responsabilidad es garantizar que las personas, especialmente la infancia, sean protegidas y no castigadas por su situación», ha finalizado Rego.