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El Ayuntamiento de Bilbao inicia la próxima semana las obras de ejecución de una serie de obras que contribuyan a mejorar la accesibilidad y salvar barreras arquitectónicas en el entorno entre la carretera Errekalde-Larraskitu y la calle Moncada, en el Distrito 7.

La actuación conlleva una inversión de 706.140 euros (IVA incluido) y se prevé que concluyan en un plazo de siete meses.

Las obras proyectadas incluyen la ejecución de un ascensor vertical, así como la construcción de unas escaleras, en un entorno en el que las pendientes y los desniveles entre calles son significativos. En concreto, en el ámbito más próximo a la obra, en la calle Moncada y la carretera Errekalde-Larraskitu, las pendientes superan el 7 % en algunos casos.

Así, y con el objetivo de propiciar un itinerario peatonal accesible, se ejecuta el nuevo ascensor. Elevador que salvará un desnivel de 6,9 metros y contará con dos paradas. Tendrá capacidad para 13 personas y se moverá a una velocidad de 1 metro por segundo.

Estructuralmente se materializará mediante un núcleo vertical, resuelto con estructura metálica y recubierta de vidrio laminado.

MOVILIDAD VERTICAL

Bilbao cuenta en la actualidad con 72 ascensores públicos en funcionamiento en la ciudad. A los que habrá que sumar los cuatro que actualmente se encuentran en ejecución –cinco con el de Moncada–: el elevador inclinado proyectado para el barrio de Masustegui, dos en el barrio de Zurbaranbarri y otro más entre la Plaza de la Cantera y la calle Concepción en San Francisco.

Asimismo, existe otro proyecto ya adjudicado y cuyas obras se iniciarán próximamente: el del ascensor de San Adrián, junto a la ikastola Urretxindorra; y otro en fase de licitación: el que se construirá entre las calles Fika e Iturribide.

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