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Luz verde del Gobierno al Plan Director de Vivienda 2025-2027: reformas urbanísticas, fondo social para financiar VPO, reserva estratégica de suelo y zonas tensionadas, nuevos pilares estratégicos (Consejo de Gobierno 27-05-2025)

  • Itxaso obtiene el plácet del Consejo de Gobierno para remitir el PDV 2025-27 al Parlamento y solicita a los grupos que sostienen al Gobierno que tomen la iniciativa de legislar “para ofrecer nuevas respuestas políticas a las clases medias vascas, ante la escasez y carestía de la vivienda”
  • La planificación busca asegurar el cumplimiento del Programa de Gobierno y establece las nuevas herramientas con las que incrementar la oferta de vivienda y proteger a los demandantes, a partir de nuevos acuerdos con los ayuntamientos vascos. “Las recetas pasan por agilizar, abreviar y flexibilizar los trámites urbanísticos, y maximizar los recursos habitacionales en la ciudad construida”

El consejero de Vivienda y Agenda Urbana del Gobierno Vasco, Denis Itxaso, ha presentado este martes el nuevo Plan Director de Vivienda 2025-2027 (PDV 2025-27) tras haber obtenido el plácet del Consejo de Gobierno, lo que permitirá su remisión inmediata al Parlamento Vasco. En su intervención, Itxaso ha instado a los grupos que sustentan al Ejecutivo que den el paso de legislar con ambición “para ofrecer nuevas respuestas políticas a las clases medias vascas, ante la escasez y carestía de la vivienda”.

La presentación del plan supone el despliegue de una estrategia integral para hacer frente a lo que el propio consejero ha calificado como una “auténtica emergencia habitacional” en Euskadi. “Hemos perdido los equilibrios en el acceso a la vivienda. El coste del alquiler o la compra supera ya el 30% de los ingresos, y llega incluso al 39% entre quienes están registrados en Etxebide”, ha destacado Itxaso. En sus palabras “encontrar hoy un alojamiento digno ya no es solo un problema de los más vulnerables; afecta directamente a la estabilidad de las clases medias”, ha afirmado.

Asimismo, el consejero ha reconocido que “nos hemos propuesto recuperar la esperanza de miles de personas que han perdido la expectativa de acceder a una vivienda en condiciones razonables. Y lo hacemos con una política pública ambiciosa, rigurosa y valiente, que adopta una auténtica posición de combate”, ha subrayado.

Reformas, recursos y acuerdos: una hoja de ruta realista y ambiciosa

El Plan Director de Vivienda 2025-2027 se sustenta en tres grandes fundamentos políticos: reformas, recursos y acuerdos, y representa la hoja de ruta de la acción política del Gobierno Vasco en materia de vivienda durante la presente legislatura.

  • Reformas

El camino para que lo necesario se haga posible son reformas como la Ley de Medidas Urgentes en materia de vivienda, suelo y urbanismo; o el Decreto de Medidas Urgentes. Su finalidad es responder con rapidez y decisión a la nueva situación de crisis habitacional.

  • Recursos

Es necesario dedicar más recursos para aumentar la oferta de viviendas protegidas y asequibles y es posible hacerlo innovando con la creación de nuevos instrumentos de colaboración público-privada para apalancar una mayor capacidad de inversión en materia de vivienda protegida en alquiler.

  • Acuerdos con Ayuntamientos

En el camino de las soluciones, el primer paso es admitir la existencia del problema que es, precisamente, lo que implica la declaración de zonas tensionadas. El rasgo diferencial de Euskadi en la aplicación de esta política es que está basada en el acuerdo con los ayuntamientos. Asimismo, y de la mano de Eudel, y los Ayuntamientos vascos, el Departamento de Vivienda y Agenda Urbana articulará una gran reserva estratégica de suelo, que permita responder con garantías a los cambios demográficos y las necesidades de Euskadi en materia de vivienda.

“Hemos demostrado que el problema, por complejo que resulte, tiene solución si se aborda con decisión, con nuevas herramientas, y con una política que sitúe a las personas en el centro”, ha reconocido Itxaso.

El Plan Director de Vivienda parte de la convicción de que abordar el problema exige actuar en todos los frentes, combinando políticas de oferta y protección de la demanda. Su objetivo inmediato es impulsar 7.000 viviendas de alquiler asequible durante la presente legislatura, de las cuales 5.250 se pondrán a disposición de la ciudadanía en los próximos 3 años, en línea con la hoja de ruta del Pacto Social por la Vivienda, que aspira a alcanzar en 2035 las 50.000 viviendas protegidas, duplicando el número de viviendas de protección pública en alquiler, pasando de un parque total (alquiler y compra) de 74.000 a 116.000 viviendas protegidas.

Tres grandes ejes

“Hemos estructurado el plan en torno a tres grandes ejes: zonas tensionadas, reformas urbanísticas y colaboración público-privada. Cada uno de ellos responde a necesidades concretas del presente y está diseñado para construir un futuro habitable para todas y todos”, ha expresado Itxaso. También se introduce la industrialización como estrategia transversal para reforzar el sector, hacerlo más competitivo y agilizar la promoción de más vivienda asequible con menor huella ecológica.

Al mismo tiempo, el Plan establece mecanismos para proteger a los demandantes actuales de vivienda, priorizando el acceso de jóvenes y personas con derecho subjetivo, garantizado por la Ley Vasca de Vivienda. Incluye la Prestación Económica de Vivienda (PEV), las ayudas a la emancipación juvenil y programas como Gaztelagun y Bizigune, con incentivos fiscales para personas inquilinas y propietarias.

Zonas tensionadas: acuerdos locales para soluciones reales

Uno de los pilares del nuevo plan es la declaración de zonas tensionadas, un instrumento que, según ha explicado el consejero, se aplica “desde el acuerdo con los ayuntamientos, y no de forma unilateral”. Esta declaración permite controlar el precio de los alquileres, ampliar la duración de los contratos mediante prórrogas extraordinarias y activar planes trianuales municipales para aumentar la oferta de vivienda en cada localidad.

“Estamos desplegando medidas excepcionales donde más se necesitan, y lo hacemos con una visión de país, con acuerdos que van desde lo local a lo institucional”, ha subrayado el Itxaso. Además, ha recordado que este marco se completa con una fiscalidad reforzada para las personas propietarias que destinan sus pisos al alquiler residencial, así como con limitaciones al uso turístico de las viviendas en dichas zonas.

En paralelo, el Gobierno Vasco ha diseñado un paquete legislativo de reformas urbanísticas para acelerar y flexibilizar la gestión del suelo y la promoción de vivienda. “Las recetas pasan por agilizar, abreviar y flexibilizar los trámites urbanísticos, y por maximizar los recursos habitacionales de la ciudad ya construida”, ha explicado el consejero del ramo.

En este sentido, se ha aprobado la Ley de Medidas Urgentes en materia de Vivienda, Suelo y Urbanismo que permitirá a los ayuntamientos movilizar suelo con mayor rapidez, activar una gran reserva estratégica y convertir locales comerciales o espacios industriales en desuso en nuevas viviendas. Además, se establecen sanciones para los incumplimientos en zonas tensionadas y se amplían los umbrales de acceso a programas dirigidos a las clases medias.

Fondo social de vivienda y colaboración público-privada

Consciente de que el reto también es financiero, el Ejecutivo ha dado un paso más allá con la creación de un fondo social de vivienda que movilizará inversión pública y privada para aumentar el parque de vivienda protegida en alquiler. “Nos hemos apoyado en el Banco Europeo de Inversiones, el Instituto de Crédito Oficial y en inversores vascos con vocación de permanencia y un firme compromiso social”, ha anunciado Itxaso.

Este instrumento se complementará con el despliegue de la reserva estratégica de suelo ya mencionada, lo que permitirá multiplicar la capacidad de intervención y promoción de vivienda pública en todo el territorio.

Finalmente, el Plan Director de Vivienda 2025-2027 contempla una transformación profunda del sector de la construcción, apostando por su industrialización. “Sin modernizar el sector, las reformas y recursos de este trienio tendrían un alcance limitado. Por eso hemos impulsado una estrategia de industrialización que nos permitirá ahorrar plazos, reducir costes e impactos ambientales, y mejorar la seguridad laboral”, ha señalado el consejero.

Euskadi quiere aprovechar su sólida tradición industrial para consolidar un nuevo modelo de construcción más eficiente y sostenible, que garantice el cumplimiento de los objetivos de vivienda pública a medio y largo plazo.

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