Se cumple un año de la aprobación de la Ley de Infancia y Adolescencia de Euskadi

- La nueva ley empieza a calar en centros educativos, clubes deportivos, asociaciones de tiempo libre y administraciones
- El Gobierno Vasco crea un documento de lectura fácil de la Ley de Infancia y Adolescencia
El Gobierno Vasco ha dado un paso significativo con la preparación de una versión adaptada de la Ley 2/2024 de Infancia y Adolescencia, demostrando su compromiso con hacer accesible la legislación a todos los públicos, especialmente a sus principales destinatarios: las niñas, niños y adolescentes. Esta adaptación en lectura fácil representa un avance concreto en la implementación de la propia ley, que en su articulado contempla el derecho a la información adaptada y comprensible para las personas menores de edad.
La elaboración de este documento ilustrado y con lenguaje simplificado permite que la norma trascienda el ámbito jurídico y llegue a toda la sociedad vasca. Facilita que familias, educadores, profesionales que trabajan con la infancia y, sobre todo, las propias niñas, niños y adolescentes, puedan conocer y comprender sus derechos y responsabilidades. Esto resulta fundamental para empoderar a las personas menores de edad como sujetos activos de derechos y fomentar su participación en la construcción de políticas públicas que les afectan directamente.
Entre los usos prácticos de esta herramienta destacan su aplicación en entornos educativos para trabajar la educación en derechos, su utilidad como documento de referencia para profesionales que necesitan explicar aspectos legales a menores, y su valor como instrumento de sensibilización social sobre la protección de la infancia.
Con esta iniciativa, el Departamento de Bienestar, Juventud y Reto Demográfico del Gobierno Vasco consolida un modelo de administración transparente y cercana, que materializa elementos innovadores de la ley como la creación de una estrategia integral contra la violencia hacia la infancia y la adolescencia o los mecanismos para garantizar la participación infantil. Este enfoque alineado con la Convención sobre los Derechos del Niño sitúa a Euskadi a la vanguardia en políticas de transparencia y participación infantil a nivel estatal.
Innovaciones destacables de la ley
“La Ley 2/2024 de Infancia y Adolescencia recoge novedades que hacen las personas menores de edad pasen a ser titulares de derechos y no solo sujetos a quienes se protege” ha declarado la consejera Nerea Melgosa.
Se incorpora la obligatoriedad de formar a profesionales que trabajen con menores. Por otra parte la norma crea la figura del coordinador de bienestar en centros educativos y delegado de protección en entidades deportivas. A su vez se da prioridad al acogimiento familiar frente al residencial y también surge una regulación específica de centros de menores con problemas de conducta. Son solo unos ejemplos de los beneficios originados por la Ley de Infancia de Euskadi y que en algunos ámbitos como los centros educativos, clubs deportivos o asociaciones de tiempo libre ya empiezan a calar.
“Con esta ley queremos hacer una promoción de los derechos de la infancia, ya que a nuestro juicio deben de ser un eje vertebrador y transversal de las políticas públicas. Queremos seguir avanzando en la prevención de la violencia y seguir dando pasos para evitar la revictimización secundaria de los y las menores. Esta ley reconoce los derechos al buen trato, a vivir en entornos seguros y a un medioambiente saludable” ha subrayado la consejera de Bienestar, Reto Demográfico y Juventud.
La Disposición Adicional Primera de la Ley 2/2024 de Infancia, establece la creación y puesta en marcha en la Comunidad Autónoma del País Vasco de un servicio de atención integral y especializada de la población infantil y adolescente que haya sido víctima de violencia sexual.
En el último año se han hecho múltiples avances interdisciplinares en el proyecto Barnahus como por ejemplo la recepción de la obra y los contratos de personal responsable del servicio y el mobiliario y equipamiento. Esto hace que se esté más cerca que nunca de la materialización del modelo en Euskadi.
Del mismo desde el Departamento de Bienestar, Reto Demográfico y Juventud se está realizando un proyecto piloto para acercar los procesos culturales a niños/as y adolescentes en situación de vulnerabilidad, junto con otros que no están en esa situación, para tratar de lograr varios objetivos concurrentes:
- Por un lado, observar cómo afecta el derecho de acceso a la cultura a menores vulnerables, y ver en qué medida la cultura puede tener un efecto transformador tanto en ellos/as como en sus familias.
- En segundo lugar, promover procesos de interculturalidad entre menores vulnerables, en su mayoría de origen migrante, y niños/as o adolescentes no vulnerables de origen autóctono (al proponerles trabajar sobre sus propias historias -tanto a unos como a otros- como temas de trabajo para los procesos culturales).
- Promover la alfabetización mediática y digital en menores en situación de vulnerabilidad.