Madrid, 13 de junio de 2024.– La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha advertido hoy del “durísimo impacto” que las violencias tienen sobre las niñas y niños, una realidad que “no puede seguir siendo un debate invisible”. Rego ha hecho esta valoración durante la jornada Iniciativas del Gobierno para la erradicación de las violencias contra la infancia y la adolescencia.
Frente a ello, la ministra ha subrayado la necesidad de seguir desarrollando todas las herramientas que brinda la Ley Orgánica de Protección Integral de la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia (LOPIVI), impulsada por el Gobierno de coalición progresista.
Rego ha calificado la ley como “un hito en la historia de España, resultado del trabajo y el apoyo de muchas entidades y asociaciones del país”, que ha transformado profundamente el paradigma de protección de la infancia en España. “De la misma forma que hemos tenido un debate público sobre la violencia contra las mujeres, que ha sido útil y nos ha permitido avanzar y construir una sociedad mejor, necesitamos tener también un debate sobre las violencias contra la infancia para ampliar sus derechos”, ha aseverado.
La ministra ha recordado los compromisos internacionales de España con los derechos de la infancia, especialmente la Convención sobre los Derechos del Niño, y ha enfatizado la necesidad de que las leyes y las políticas reflejen esta perspectiva. “En nuestro mundo, las leyes de las que nos dotamos, se hacen en muchísimos casos a espaldas de la infancia y la adolescencia”, ha afirmado Rego.
La responsable de la cartera de Juventud e Infancia también ha abordado varios temas críticos en los que el ministerio está trabajando, incluyendo la pobreza infantil, la salud mental y la seguridad en entornos digitales. Sobre este último punto, la ministra ha destacado el trabajo que está realizando el comité de 50 personas expertas para la creación de “un acuerdo intergeneracional de país para construir entornos digitales seguros”.
En su discurso, Rego también se ha referido a la violencia en espacios institucionales y asociativos, mencionando el informe del Defensor del Pueblo sobre abusos en la Iglesia como un camino importante a seguir. “La protección de la infancia en estos espacios debe ser una prioridad”, ha insistido.
Otro aspecto abordado ha sido la violencia vicaria, una forma de violencia que busca el sufrimiento de las mujeres a través del daño a sus hijos. La ministra ha asegurado que su departamento, en coordinación con otros ministerios, está trabajando en un paquete de medidas para combatir esta problemática.
