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Los recursos humanos dedicados a la salud mental en Osakidetza han aumentado un 60% desde 2009

  • Seguir reforzando la atención en este ámbito es prioritario para el Departamento de Salud
  • Ese porcentaje de crecimiento en psiquiatría de adultos se eleva hasta doblar el personal en el caso de la psiquiatría infantil
  • La red ambulatoria y las mejoras terapéuticas han permitido reducir la actividad y los ingresos en hospitales de las redes de salud mental
  • El Consejero de Salud, Alberto Martínez, anuncia la creación de una estructura de coordinación específica dentro de Osakidetza para un abordaje integral que mejore la respuesta a la demanda de la población   

La salud mental es una de las prioridades máximas del Departamento de Salud del Gobierno Vasco, que apuesta por la persona como eje central y un enfoque comunitario de la atención. Así lo ha manifestado el Consejero de Salud, Alberto Martínez, en su intervención en el XXVII Congreso Estatal de Psiquiatría, que se celebra en Donostia con la participación de más de 1.500 expertos en este ámbito.  

Según ha subrayado, en los últimos años, la evolución de la asistencia ha llevado aparejado un aprendizaje para el sistema y un incremento relevante del número de profesionales especializados. Así, la plantilla en las estructuras hospitalarias y de salud mental en Euskadi ha tenido desde 2009 un incremento del 63%. En concreto, un 58% en el caso de psiquiatría de adultos y un 182% en el caso de psiquiatría infantil; existe además un 19% más de profesionales en activo respecto a la plantilla estructural. En Euskadi hay 15 psiquiatras por 100.000 habitantes, el ratio más alto del Estado. Al mismo tiempo, la red ambulatoria y las mejoras terapéuticas han permitido reducir la actividad media y el número de ingresos en centros hospitalarios de las redes de salud mental.

En este sentido, Alberto Martínez ha puesto en valor el hecho de que el Departamento de Salud y Osakidetza, previeran y planificaran, antes incluso de la pandemia, una serie de recursos para atender, muy especialmente, las necesidades derivadas de la enfermedad mental grave.          

Nuevas unidades de atención infantojuvenil

Así, recordaba que en los últimos años se han abierto 8 unidades nuevas, de hospital de día, para la atención precoz y para las necesidades de la población infantojuvenil en los tres territorios históricos. Y anunciaba la próxima apertura de dos nuevas unidades en el Hospital Universitario Cruces: una de Alta Resolución que atenderá a pacientes agudos en crisis sobre los que se aplican intervenciones específicas que permitan su continuidad de tratamiento ambulatorio o bien su ingreso psiquiátrico; y otra de Hospitalización Intensiva en régimen cerrado y estancia corta para su posterior derivación a dispositivos ambulatorios, si se objetiva una mejoría, o, en su caso, para ingreso en un dispositivo subagudo.

Todo ello, en el marco de la Estrategia de Salud Mental de Euskadi, que presta especial atención a los trastornos de conducta alimentaria, salud mental infanto-juvenil y patología dual (relacionada con las adicciones). Además de los programas como el que Osakidetza desarrolla desde hace dos años en el ámbito de la salud infantil en Atención Primaria; el cribado para la detección de depresión mayor en adolescentes; los convenios sociosanitarios con las Diputaciones Forales; y otras estrategias como la de prevención del suicidio y la sociosanitaria, de la mano de las instituciones forales y locales.

El Consejero de Salud ha insistido en su determinación de seguir reforzando la atención en este ámbito, donde ha anunciado la puesta en marcha de una estructura de coordinación específica dentro de Osakidetza para un abordaje integral que mejore la respuesta a la demanda de la población, además de la creación del puesto funcional de psicólogo de atención comunitaria para labores no asistenciales, educación y abordaje de colectivos de pacientes. 

El Consejero Alberto Martínez es consciente de que, en los últimos años, ha aumentado la preocupación por situaciones de estrés emocional y malestar psicológico que requieren atención, siempre desde la doble premisa de no psiquiatrizar procesos relacionados con el bienestar emocional pero sin banalizar por ello la trascendencia de la enfermedad grave. Destacaba asimismo que, paralelamente, ello ha propiciado una cierta reducción del estigma que rodeaba la enfermedad mental: “Es muy importante que la ciudadanía no oculte lo que le pasa, que acuda a pedir ayuda, y sobre todo que tenga adónde acudir”, aseguraba, incidiendo en que en muchos entornos, como el educativo o el laboral, se ha tomado conciencia de esta realidad y ya se están articulando protocolos y recursos para abordarla.

En el Congreso Estatal de Psiquiatría, esta mañana, Andrea Gabilondo, directora de la Red de Salud Mental de Gipuzkoa de Osakidetza ha recibido un premio al Mejor Póster en Investigación Clínica en Psiquiatría por el desarrollo, evaluación y despliegue en Euskadi del programa BIZI para fomentar la prevención del suicidio por agentes comunitarios.

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